Vamos a comer vacuno, tralará…
¿Por qué? Pues porque tiene infinidad de beneficios para la salud, nutrientes esenciales para generar defensas -que ahora nos vienen de perlas-; es buena y necesaria para el crecimiento y el desarrollo cognitivo de los niños; porque su consumo contribuye a que haya trabajo en el mundo rural, ya que el sector cárnico da de comer a unas 97.000 personas en nuestro país (la mayoría en el campo); y porque tenemos un producto de primera en España… ¿o no están buenísimas nuestras Avileñas, Retintas, Frisonas, Rubias gallegas o Asturianas de los valles? Si os faltan razones, os contamos alguna más que aporta Provacuno en su campaña por su defensa junto a la Unión Europea.
Y es que estos días, con motivo del Día Mundial de la Alimentación especialmente, se habla mucho de la necesidad de recuperar una ídem equilibrada y centrada en los principios de la Dieta Mediterránea donde por supuesto, la carne, es parte fundamental, -como todo, sin abusar, claro-. Hoy os hablamos concretamente de los beneficios de la de vacuno, que así, de entrada, os decimos que tiene hierro, zinc y magnesio, es rica en vitamina B12, en potasio, ayuda al desarrollo de la masa muscular y favorece la pérdida de peso al ser rica en proteína biodispensable. Eso sí, no hay que olvidarse de combinarla con ejercicio, claro… milagritos, a Lourdes.
En España además podemos presumir de tener muy buenas razas de ganado; criadores excelentes que saben sacarles todo el partido; y un listón bien alto en cuanto a estándares de seguridad alimentaria y modelos de producción se refiere que nos aseguran la trazabilidad y la calidad de las reses; además de mirar por el respeto al medioambiente y el bienestar animal. Cabe decir en cuanto a la sostenibilidad, que se está trabajando en la economía circular y el ‘desperdicio cero’ a través de programas como el ‘Life beef carbon’ para reducir las emisiones de gases al menos un 15% en los próximos 10 años.
La carne de vacuno tiene un alto contenido en aminoácidos esenciales y minerales y, como dice Javier López, director de Provacuno (la Organización Interprofesional de la Carne de Vacuno), “tiene beneficios nutricionales para niños, jóvenes, mujeres gestantes y lactantes, deportistas y mayores”.
Seguro que habéis visto en redes sociales su iniciativa junto a la UE ‘#HazteVaquero’… pues nosotros, que ya lo éramos, nos sumamos con ella a defender la carne nacional y europea, porque gozamos de una diversidad de razas envidiable, multitud de IGP’s -a cual mejor-, cada una con sus peculiaridades, variedades de cortes… y además, como destacan con esta iniciativa, la producción y comercialización de carne de animales más jóvenes, alimentados con cereales y oleaginosas de alto valor nutritivo suponen también una ventaja con respecto a las que se crían en otros países.
Y más allá de todo lo técnico… que es muy versátil y en la cocina la aprovechamos de mil maneras: en carpaccio, tartar, tataki, a la plancha vuelta y vuelta, parrilla con todo el sabor a leña, al horno, en guiso, hecha albóndigas, empanada y entre panes, embutida, para burger… ¿unos callos? ¿Hola? ¿Queda alguien leyendo o estáis todos ya cocinando? Que aproveche ¡y haceos vaquer@s!