Carne y cerveza, grandes compañeros de mesa
El agua es necesaria para la vida y pega con todo, no hace falta hacer un blog sobre eso… pero la experiencia nos dice que carne y cerveza son también grandes aliados. Nos atreveríamos a decir que igual que el vino, y es que todo va en función de gustos. Ya sea para realzar y complementar sus sabores y textura; o para contrastarlos, cada animal y corte tiene un tipo de cerveza con la que hace match gracias a su diversidad de estilos y perfiles. Además de aprender a combinarlas, ¿te animas con una receta?
Desde la antigüedad, la cerveza ha sido una bebida esencial en muchas culturas. En la Edad Media, por ejemplo, los banquetes de la nobleza incluían carnes asadas acompañadas de cerveza, ya que el agua no siempre era segura para el consumo. Este no es el caso en la actualidad, pero tampoco hemos visto necesario dejar de beberla…
Desde entonces, el maridaje de carne y cerveza ha evolucionado desde combinaciones simples hasta otras más refinadas gracias a la amplia variedad que se elaboran por todo el mundo. En el pasado, la regla general era que las cervezas más ligeras se servían con carnes blancas, mientras que las cervezas más oscuras y robustas acompañaban carnes rojas y de caza. Sin embargo, hoy en día, los maridajes han dejado de ser rígidos y se han convertido en una experiencia más subjetiva y creativa.
A la hora de combinar carne y cerveza se puede enfocar de varias maneras:
- Maridaje por complemento: Se elige una cerveza con características similares a la carne, como una Red Ale con carne de jabalí, donde los sabores tostados y dulces se potencian mutuamente.
- Maridaje por contraste: Se busca equilibrar sabores opuestos, como una IPA amarga con cordero, donde el amargor de la cerveza contrasta con la grasa y el sabor profundo de la carne.
- Maridaje catalizador: Se utiliza la cerveza para intensificar una sensación, como una Stout con carne especiada, donde los matices de café y cacao prolongan el picante.
En España, por ejemplo, se han desarrollado guías especializadas que combinan cervezas artesanales con platos tradicionales, desde tapas, como la que hizo la Asociación de Cerveceros de España y Glovo a partir del Barómetro GastroEspaña según nos cuentan en La Razón, hasta carnes a la brasa. La versatilidad de la cerveza permite explorar combinaciones únicas que realzan los sabores de cada plato. Y si quieres comprobar si encajan, puedes probar con estas sugerencias.
Maridajes recomendados de carne y cerveza
- Pollo y Pale Ale – La ligereza de esta cerveza con notas cítricas y florales complementa bien el sabor del pollo, ya sea asado o a la plancha o parrilla, sin dominarlo. Además, su carbonatación ayuda a limpiar el paladar después de cada bocado.
- Pavo y Saison – Como buena cerveza ‘de granja’, esta belga ácida y de final seco, muy poco conocida en España, la verdad, puede ser un maridaje un poco atrevido pero original para el pavo ahumado y también para el pollo al limón. ¿Has probado alguna? Cyclic hace esta con melocotones en Barcelona.
- Ternera y Lager – Las cervezas lager, ligeras y refrescantes, equilibran la jugosidad de una carne de ternera a la parrilla, resaltando su sabor sin ensombrecerlo. Combinación ganadora y quizás la más fácil de hacer con las birras locales.
- Cerdo Ibérico y Amber Ale – El dulzor y caramelización natural de la carne del cerdo ibérico se potencia con las notas maltosas y ligeramente tostadas de una Amber Ale, originaria de California y que tiene además un amargor moderado.
- Caza y Stout – La intensidad y el carácter terroso de la carne de caza merece otra compañera a la altura, como las cervezas Stout, ricas en matices de café y cacao. Son oscuras, aromáticas y potentes y no te espantes con lo que viene ahora, pero es recomendable servirlas a unos 9-12º para apreciar todos sus matices.
- Cordero e IPA – Las cervezas IPA, con su amargor pronunciado debido a que llevan más lúpulo para conservarse mejor, contrastan con el sabor profundo del cordero, creando una experiencia gastronómica llena de matices. ¿Te animas a probarla con unas chuletitas?
- Vaca madurada y Porter – Los cortes de vaca, especialmente las de altas maduraciones, tienen un perfil de sabor potente que se complementa de maravilla con cervezas Porter -similares a las Stout, negras e intensas, muy ‘de invierno’-, gracias a sus toques de chocolate y frutos secos. Planazo para combinarlas en casa un fin de semana lluvioso, ¿no creéis?
Ya hemos tocado prácticamente todos los palos de carne y cerveza… ahora te toca a ti probarlos y contarnos cuál es tu combinación favorita. Y si te animas a hacer una mezcla de las dos cosas, no solo a tomártelas por separado, apunta lo que viene…
Receta de Ragú de jabalí con Red Ale
Un ingrediente robusto y sabroso merece una cerveza con cuerpo y carácter. Las Red Ale, con su equilibrio entre maltas dulces y un leve amargor, puede quedar genial para hacer un guiso de carne de jabalí. Hemos descubierto una madrileña muy ‘Chula’, con aromas a frutas, pan recién tostado, notas caramelizadas y especias, que seguro que le queda fetén.
Ingredientes:
- 500 g de ragú de jabalí que puedes encontrar en nuestra tienda online
- 1 cebolla picada
- 2 zanahorias en cubos
- 2 dientes de ajo
- 500 ml de cerveza Red Ale
- 250 ml de caldo de carne
- 2 hojas de laurel
- 1 ramita de romero
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva
Preparación:
En una cazuela grande, sofreímos la cebolla y el ajo en aceite de oliva hasta que estén dorados. Después añadimos la carne de jabalí y la doramos por todos lados. Incorporamos las zanahorias y las hierbas aromáticas, vertemos la cerveza Red Ale y dejamos que reduzca unos minutos. A continuación añadimos el caldo de carne, tapamos y cocinamos a fuego lento durante 2 horas en ola convencional, hasta que la carne esté tierna, o unos 45 minutos en olla rápida. Corregimos de sal y pimienta y servimos con unas patatas asadas de guarnición. ¡A disfrutar!
Ya habéis visto que no solo el vino sirve para maridar, y que la combinación de carne y cerveza abre un mundo de posibilidades para experimentar con sabores y crear armonías excepcionales. Ya sea una parrillada con una refrescante Lager con amigos; o un guiso de caza con una intensa Stout un domingo por la tarde en familia, estas combinaciones pueden transformar cualquier comida en una experiencia gourmet. ¿Con qué match vas a empezar?