Llega la época de caza
Con el otoño comienza la temporada más esperada por los cazadores y para los amantes de estas delicias en el plato. Pero… ¿sabes todos los beneficios que aporta este tipo de carnes? Son muy saludables, naturales y sin residuos de fármacos o sustancias nocivas por la alimentación que llevan y el entorno en el que viven. Descubre todas las características de la carne de caza esta semana con nosotros y anímate con alguna de las suculentas piezas que tenemos disponibles en nuestra tienda online.
Aunque cada animal es diferente, en general los animales silvestres tienen una serie de particularidades que los diferencian de los que se crían en granjas. Su carne tiene menos contenido en grasa y una mayor concentración de proteínas, siendo éstas de alto valor biológico. Además, las carnes de caza son ricas en hierro y fósforo, y contienen importantes cantidades de magnesio y potasio. Por ejemplo, son muy recomendables para personas que padecen anemia. En cuanto a su contenido vitamínico, estas carnes destacan por su aporte en aquellas del grupo B.
Pero uno de los detalles más importantes es, que podemos estar seguros de que carecen de residuos de hormonas, antibióticos y otros fármacos. Eso es porque viven libres en la naturaleza y su alimentación se ha basado en lo que les proporciona el medio ambiente, en dehesas o bosques.
En cuanto a sus características, en general la carne de caza es más dura y presenta un color rojo más oscuro, que se incrementa con la edad del animal, y su sabor es más fuerte. Desde luego la terneza y textura definen la calidad de la carne.
Pero como en todo, hay que consumirlas con moderación porque la caza aporta más ácido úrico que otras carnes por ejemplo, y siempre hay que asegurarse de su procedencia para cerciorarse de que los animales estén sanos. En Solobuey contamos con proveedores de calidad y expertos que certifican el origen de la carne que por supuesto está sometida a rigurosos controles.
En nuestra tienda online puedes encontrar perdiz roja de tiro, así como ragú, solomillo o lomo de jabalí o de venado, piezas riquísimas que podrás cocinar de múltiples maneras, aunque te recomendamos que lo guises, lo prepares en estofado o lo marines y cocines con alguna salsa. Para ello, emplea un buen vino tinto, frutas (arándanos, mango, naranja, manzana…), tomillo, cebolla o zanahoria. Déjalo en reposo 24 horas, escúrrelo y cocínalo según la receta que hayas elegido. Aprovecha el marinado sobrante para realizar una salsa y estará de lujo.