Aprovechamos el pollo de la cresta al espolón… ¡o casi!
Con esto de tener que hacer compras grandes para reducir al mínimo las salidas durante la pandemia, lo mejor es hacer una buena lista para hacer una compra consciente y programada y aunque a veces es inevitable pasar por el súper, la carne de calidad puede llegar a la puerta de casa sin demasiadas molestias -nosotros nos encargamos de ello a través de esta web-. Pero el problema que nos estamos encontrando es que se nos satura la nevera. En el post anterior os hablábamos de qué ingredientes es mejor congelar ya cocinados para liberar espacio y tener la comida lista en cualquier momento… hoy os vamos a hablar de un producto del que, igual que del cerdo, se aprovecha casi todo y que además es barato, bien sabroso y nos puede cundir para unas cuantas elaboraciones. Claro que sí, ¡hablamos del pollo!
Vamos a basarnos en nuestro pollo de corral entero, que pesa entre 2 y 3 kg. y a despiezarlo para sacarle el máximo partido posible en diferentes recetas para 2 personas. Preparad un cuchillo bien afilado, una tabla de cortar, ¡y al lío!
Con una pechuga haremos Nuggets de pollo. Nos ha gustado mucho la receta de Alfonso López de Recetas de Rechupete donde nos hace falta, además del pollo, 90 g de queso crema, sal al gusto, un huevo para rebozar, 2 cucharadas de harina y 2 de pan rallado. Podéis ver el resto de la elaboración en el link (ojo, sus cantidades son para 4 pax y las que os hemos puesto aquí son para 2).
Con la otra pechuga, aprovechando la visita a la página de Alfonso, haremos Fajitas mexicanas. Necesitamos además 4 tortillas de trigo, ½ pimiento verde, ½ pimiento rojo, ½ pimiento amarillo, 1 cebolla; y para adobar el pollo un diente de ajo pequeño, sal, pimienta negra, comino molido, pimentón dulce y para quienes les guste el picante, un ají o una guindilla picante (opcional, claro). Para aromatizar tendríamos que añadir 1 lima y un manojo de cilantro fresco al gusto y para cocinarlo todo, 50 ml de AOVE. Si os gusta la idea, podéis consultar toda la preparación en el enlace.
Con las alitas haremos un Arroz de alitas con verduras, donde utilizaremos las mollejas e hígado también para el fondo. La receta con las cantidades perfectas para 2 nos las da el blog ‘Cocinando con Lola García’: 2 alitas de pollo, 100 g de arroz bomba, 350 g de caldo hirviendo (hecho con los despojos del pollo y alguna verdura), 1 diente de ajo, un trocito de cebolla, un trocito de pimiento rojo, un trocito de pimiento verde, una zanahoria pequeña, un trocito de calabacín, 100 g de judías verdes, un puñadito de guisantes congelados, ½ tomate, sal, aceite de oliva y colorante. Si os gusta como suena, tenéis todos los detalles con fotos en su blog.
Los cuartos traseros los vamos a asar. Si nos comemos el contramuslo acompañado de unas ricas patatas y una cebolla, dejaremos los muslitos para una jugosísima ensalada Cesar con pollo.
Para los Contramuslos asados ponemos sobre una bandeja para horno una capa de patatas y cebolla que salpimentaremos y a las que añadiremos unas gotas de AOVE. Encima pondremos los cuartos traseros, también salpimentados y con algunas hierbas tipo orégano, tomillo y romero. Además podemos hacer un majado de ajo, perejil, vinagre (para que la piel quede crujiente) y un poco de aceite y écharselo por encima. Primero los pondremos con la piel hacia abajo, con el horno a 180º durante 25 minutos. Tras ese tiempo les daremos la vuelta y dejaremos otro tanto de tiempo, los últimos 5 minutos con el grill a 200º para que termine de hacerse la piel y quede crujiente.
Los muslos ya asados los deshuesaremos, les quitaremos la piel y los picaremos para hacer, por ejemplo, una Ensalada César. Pakus, de Directo al Paladar nos da esta sabrosa receta utilizando la pechuga, pero podéis hacerla igualmente con esta parte tan tierna del pollo. También necesitaremos: lechugas mezcladas al gusto, picatostes (pan en tacos frito o asado en el horno), anchoas, huevo, aceite de oliva virgen extra, ½ cucharada de vinagre de manzana, ½ cucharada de salsa Perrins, zumo de medio limón, queso Parmesano en lascas para decorar, un diente de ajo, sal y pimienta al gusto. Esta es bien fácil, una ensalada con gracia… para ‘desintoxicar’ pero sin dejar de disfrutar con esa salsa maravillosa. Todos los detalles par hacerla, en el enlace pinchando sobre el nombre de la receta.
Ya hemos utilizado bien a la ‘víctima’ pero aún queda aprovechamiento… con las carcasas, las patas, y el cuello vamos a hacer un Caldo de pollo. Lo ponemos todo a hervir con un puerro, una cebolla, dos zanahorias, agua, sal y pimienta durante aproximadamente 2 hora a fuego bajito, al chup chup, y nos quedará un fondo delicioso para cualquier otro guiso o incluso hacer una sopita añadiéndole unos fideos. Incluso con la carne que queda adherida a la carcasa y las verduras todavía se pueden hacer croquetas, el relleno para unas patatas… Amortizado, ¿no?
¿Y tenía, o no tenía las mismas posibilidades que un cerdo?