Acabamos de empezar el cole y aunque en parte es un alivio volver a cierta rutina, nos encontramos con nuevos problemas: organizar las cenas para niños y mayores, lo más sanas y equilibradas posibles, y que todos estén contentos. Esto sí que es un reto y no el tortilla challenge.

Septiembre es un mes de cambios para los peques, de ilusiones por el nuevo curso, por volver a ver a los amigos… aunque les dure dos o tres semanas, sí, las que tardan en empezar al ‘terrible comedor’. Que no es que sea malo, es que aquí saben que tienen que comer de todo, que no hay una abuela cerca que les fría un huevo si no quieren las lentejas. La ‘pesadilla’ de la buena y variada alimentación comienza para ellos, y por eso hoy nos hemos propuesto suavizar esa ‘tortura’ con varias ideas divertidas de cenas para niños. Seguro que os vienen bien.

Recetas con carne y verduras

Una cosa es que les guste y otra que sean opciones sanas, que no siempre coincide el concepto… Si por ellos fuera, la mayoría vivirían a base de burgers, pizza y macarrones, y aunque estos cheating days nos los pegamos todos de vez en cuando, lo ideal es, al menos, que todo esto sea casero y por supuesto, combinarlo con verduras, legumbres, huevos…

Hamburguesa cuatricolor. Empezamos justamente por uno de esos platos de su top: las hamburguesas. Pero os proponemos una con nuestra carne picada de ternera mezclada con daditos de zanahoria cortados muy pequeños y maíz dulce. Os recomendamos hervir un poquito la zanahoria para que los mordiscos no sean taaan crujientes. Y si os gusta el toque ácido, podéis añadirle también unos pepinillos picaditos ¡y ya tenemos la cuatricomía en el plato! Podéis acompañar la burger con unos tomates cherry o unos chips de patata y batata en láminas al horno.

Quiche de verduras y panceta. Si lo dejamos en la primera parte del plato, es posible que salgan corriendo, pero os aseguramos que si pocháis bien la verdura, se olvidarán de que la lleva. Nuestra propuesta lleva puerro y cebolla bien pequeñitos y pochados. Una vez que estén tiernos añadimos unas tiras de panceta y cuando esté cocinada, reservamos. Por otro lado, batimos 4 huevos, mezclamos con 200 ml de nata, con las verduras y la panceta, y le rallamos unos 200 g de dos de vuestros quesos favoritos. Le queda muy bien por ejemplo el Comté y el Idiazabal. Salamos la mezcla, y a un molde de silicona o pyrex horneable. Si les gusta, también podéis añadirle ramitas de brócoli o cherrys cortados a la mitad para que floten y le den colorcito a la quiche. En media hora a 180º la tenéis lista.

Pencas con jamón y queso. Hay un truco para camuflar ciertos alimentos ‘malsonantes’ como “acelgas” o “espinacas” -que a algunos nos encantaban, por cierto- que suelen estar entre las peores pesadillas de muchos peques: rebozar, gratinar, bañar en queso… En este caso vamos a utilizar las pencas -lo blanco- de las acelgas, para hacer de ‘tapas’ de un sándwich. Es decir, penca, una lonchita fina de queso Tetilla D.O, un trocito de jamón cocido, otra penca, rebozamos con harina y huevo ¡y a la sartén! La verdura queda tan sutil que ni se enterarán de lo que están comiendo, palabra.

Más cenas para niños que encantan a los mayores

¡Bien de croquetas! A poca gente conoceréis que no le gusten las croquetas, ¿verdad? Pues aunque los fritos no son para todos los días, con las freidoras de aire la verdad es que podemos permitirnos algún pecado más. Para hacer la bechamel seguro que ya tenéis vuestro truco de la abuela, pero si es vuestra primera vez, nos chivan que esta de Karlos Arguiñano sale perfecta. Las de jamón son un básico y tenéis varias opciones en nuestra tienda online por enteros o loncheados, pero también podéis hacerlas de queso, de verduras, de pescado… aquí la creatividad no tiene límites.

Nuggets o volandrines de pollo. Pero los de verdad, eh. Pechugas de pollo de corral, cortado en tiritas en casa, tipo lágrimas, con ajito, perejil y bien empanados. Si queréis darle un toque divertido y más crujiente, los podemos rebozar con nachos de maíz triturados. Estos también se prestan a ser cocinados en una máquina tipo Cosori y así cogerán menos aceite.

Un par de opciones sin carne…

Tortilla de patata y algo más. No hace falta que les digáis qué es el ‘algo más’ porque ni se van a enterar. Puede ser calabacín, berenjena… la idea es cortar las verduras del mismo tamaño que las patatas y freírlas a la vez. ¿Habéis probado alguna vez a hacerlas en el microondas? Quedan bastante ricas y mucho más healthy, la verdad. Una vez que mezcléis con el huevo y lo cuajéis todo junto, se la zamparán sin miramientos.

Colirroz. Este ‘invento’ de tiktokers e instagramers sin duda es un descubrimiento para sustituir los hidratos del arroz por las vitaminas y la fibra que nos aporta esta verdura. Es tan simple como rallar la coliflor con picadora, a cuchillo o rallador, según la paciencia que tengamos, y ‘desmigarla’ en tamaño de granos de arroz. Una vez tengamos las bolitas, podemos usarlas de mil maneras -hasta para hacer una base de pizza-, pero hoy os recomendamos saltearlas con una gotita de aceite y ajo, como guarnición, o si le ponemos un huevo al lado, convertirla en un falso arroz a la cubana.

Y otras cuantas de ‘solo carne’, para quienes van con prisa

Las que hemos visto hasta ahora no son difíciles, pero reconocemos que algunas llevan un rato y no siempre disponemos de todo el tiempo que quisiéramos para preparar las cenas para niños más óptimas, así que dedicamos el final del post a daros unas cuantas ideas más rápidas, de vuelta y vuelta o con ingredientes que ya nos faciliten la tarea. Es el caso de los filetes de lomo de cerdo cortados para hacer libritos de jamón y queso; unos escalopes de ternera blanca que quedan super tiernos en la sartén; o, volviendo a sus favoritos, las mini hamburguesas de vaca, ternera, Angus o Wagyu. ¡Cenas listas y felices!